lunes, 29 de marzo de 2010

Peregrina

Luis Rosado Vega autor de Peregrina narra la forma en que ésta surgió:

“Llovió copiosamente una tarde y esa lluvia auspició una noche estupenda, después del teatro nos dirigimos a una sena a la casa del maestro Filiberto Romero, director de la Escuela de Música, en el auto iba Alma Reed, sentada entre Felipe y yo, con el aguacero de la tarde la tierra había abierto sus entrañas y despedía ese grato y sugestivo aroma de la tierra cuando acaba de ser fecundada por la lluvia. Alma dilato el pecho para absorber a pleno pulmón aquellas fragancias y dijo: ¡qué bien huele!

Le salí al paso con una frase simplemente galante:

-Todo huele bien porque usted pasa. Tierra, flores quisieran besarla y por eso llega a usted sus perfumes.

Dijo Felipe al punto:

- Eso se lo vas a decir en un verso.

Conteste:

- Se lo diré en una canción.

Alma rió argentinamente. Así reía. Concluido el convivio y ya en mi casa, compuse la letra. No podía olvidar a Palmerín. En la mañana siguiente lo busqué y se la di. Dos días después ya había nacido la canción”.

Así con modestia, contó Luis Rosado Vega la historia de su “Peregrina”. Una de las más hermosas canciones yucatecas tanto por la galanura de sus versos, como por la melodía de su música.

Se trata de una historia de amor que fue y no fue, ella Alma María Sullivan, nombre verdadero de Alma Reed, corresponsal del The New York Times en México. El Felipe Carrillo Puerto gobernador de Yucatán Mexico, se conocen se enamoran y se comprometen en matrimonio.

Ella en su trabajo de corresponsal anda por todo el país, cuando en 1923 al concluir el mandato Álvaro Obregón y éste trata de imponer a su candidato, Plutarco Elías Calles. Adolfo de la Huerta se levanta en armas y se lanza contra Yucatán venciendo a Felipe, lo apresa y es sometido a un juicio sumario y fusilado el 3 de enero de 1924.

En el Cementerio General de Mérida momentos antes de ser fusilado llamó a uno de sus inminentes ejecutores, puso en su mano un anillo y le dijo: - entrégaselo a Pixán Halal. Pixán Halal es Alma Reed.

Carrillo Puerto, El Dragón de los ojos verdes, hacía los preparativos para casarse en San Francisco California, con la periodista estadounidense, cuando le sorprendió la rebelión delahuertista que lo llevó al paredón.

Ella en 1966 le dice a un senador aspirante a la gubernatura de Yucatán – usted se sentará en la silla de Felipe.

- Perdón ¿Quién es usted? Preguntó el sorprendido político.

- Alma Reed – respondió la mujer.

- Señora es un honor.

- Usted será gobernador de Yucatán, y quiero pedirle un favor para cuando lo sea.

- No sé si lo seré, pero estoy para servirle.

- Yo no lo veré como gobernador, moriré pronto. Y quiero pedirle que cuando muera, me sepulten en Mérida, cerca de Felipe.

Pasó el tiempo, y una noche el senador Carlos Loret de Mola, que efectivamente llegó a la gubernatura de Yucatán, recibió, por conducto de un diplomático estadounidense, una urna con las cenizas de Alma Reed, quien había fallecido el 20 de noviembre de 1966.

- Nos dejó dicho que usted sabría qué hacer con la urna.

Carlos Loret con mucha discreción cumplió con el encargo.

Hoy Alma Reed descansa en el Cementerio General de Mérida, muy cerca – los separa solo una vereda – de donde fue fusilado y sepultado su amado Felipe, sitio este último convertido en la Rotonda de los Socialistas Ilustres.

Para ver la letra entrar aquí