Tres Luceros
A
Montserrat, Sara y Sergio
Tres luceros divinos
que alumbran mi existir,
aparecen como lindos signos
dando sabor y razón a mi vivir.
Cada uno diferente, y tan igual;
una con ingenio y chispa,
otra con ternura y servicial,
y el chaval con una entrega total.
Si no están y no los siento,
mi alma se encoge dentro
y una lagrima etérea y simulada
sale y se pierde al viento.
Y cuando están y al cuello se me tiran,
mi vida se expande y me salen fuerzas
para jugar, lidiar, correr con prisa,
y mi alma vuela, emerge la sonrisa.
Tres luceros radiantes
que llegaron así, sin más.
Sólo una cosa sé sin titubear;
sí me faltan y no los puedo contemplar
mi senda pierde luz….. no vivo más.